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Friday August 6th, 2021

COVID-19: Así cambiamos y nos reinventamos

Después de aproximadamente un año y medio de pandemia, poco a poco vamos recuperando alguna noción de lo que consideramos “normal”: cada vez hay más personas vacunadas, se van abriendo las fronteras y se van flexibilizando las medidas sanitarias.

Sin embargo, hay cambios en los hábitos de vida que parece que llegaron para quedarse: la manera en que vemos el mundo, en que nos relacionamos con los demás, las cosas que consumimos y cómo lo hacemos parecen haberse transformado para siempre. Pero ¿cómo se dio este cambio?

Dos metros o más de distancia. Mascarilla, alcohol, guantes. Desinfectar todo lo que llegue a la casa, reunirse con seres queridos sólo al aire libre. Los protocolos de salud que en principio nos sorprendían y en algunos casos molestaban, se han vuelto parte de nuestra «covidianidad», y símbolo de buena convivencia en sociedad.

Vamos, seguro que eres de los que ven a alguien sin mascarilla en la calle, o ves alguna película donde hay una multitud, donde las personas hacen algo como llevarse la mano a la boca o compartir un vaso de agua y te resulta extraño e incómodo: una alerta COVID aparece automáticamente en nuestro cerebro cuando vemos imágenes de una realidad que ya no se parece a la nuestra. ¡A todos nos pasa!

Hay que decirlo: el coronavirus nos cambió la vida. Y bueno, la manera de consumir también. Como todos (o casi todos) los países se vieron obligados a disminuir la circulación de personas para disminuir la propagación del virus, eso incluyó cerrar las puertas de sus negocios. Por lo que, para que no sucediera un quiebre insostenible de la economía, era inminente reinventarse.

Vender en línea es todo lo que está bien

Las restricciones del COVID-19 hacia el sector económico, impulsaron «el aumento del comercio electrónico»; como lo indicó la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD, por sus siglas en inglés) en un informe publicado el 3 de mayo de 2020, donde muestran que las ventas minoristas pasaron de un 16 % a un 19 % en sólo dos meses.

¡Sólo dos meses! Si lo piensas, el paso a la virtualidad fue súper veloz. Muchos negocios que nunca habían pensado siquiera en abrir una tienda virtual, de repente tenían que aprender a diseñar su sitio web, proponer métodos de pago virtuales, y sobre todo coordinar envíos. Pero la dificultad que eso pudo significar no detuvo a los y las líderes de negocios grandes y pequeños, que hicieron el cambio de presencial a virtual en tiempo récord.

En ese sentido, en su encuesta titulada La covid-19 y el comercio electrónico, realizada con otras empresas cibernéticas en Alemania, Brasil, China, Rusia, Italia, Corea del Sur, Sudáfrica, Suiza y Turquía, arrojó que más de la mitad de los encuestados (unos 3,700): «compran en línea con mayor frecuencia y recurren más a internet para leer las noticias e informarse sobre salud y ocio digital».

«La pandemia de COVID-19 ha acelerado el tránsito hacia un mundo más digital. Los cambios que hagamos ahora tendrán efectos duraderos a medida que la economía mundial comience a recuperarse» – Mukhisa Kituyi, secretario general de la UNCTAD.

Comprar en línea no requiere distanciamiento social

Este cambio hacía las compras por internet, en un principio, tenía un razonamiento muy lógico: salir a tiendas implicaba generar aglomeraciones de personas, cuestión que perfectamente podía ser evitada con los envíos de productos directamente hacia las casas de los consumidores.

Ahora, en la nueva normalidad, las compras en internet no sólo responden a una necesidad sanitaria: lo hacemos porque descubrimos que es la manera más rápida, fácil y cómoda de comprar. No sólo porque no tenemos que salir de la casa, sino también porque a través de internet tenemos acceso a cosas que antes nos resultaban inaccesibles por la distancia: todos los productos, de todas partes del mundo, los tenemos a la distancia de un click. ¿Ese libro que no puedes encontrar en el país? a un click de distancia, ¿esa camisa que venden en otra ciudad y no tienes tiempo de buscar? sólo debes darle al “botoncito” de comprar. Lo que quieras lo puedes tener en tiempo récord.

Los envíos y compras en internet han eliminado todos los límites y distancias.

¿Y cómo hacen en EPS?

Para nuestros clientes que traen sus compras por EPS, les contamos parte del proceso de embalado para su tranquilidad. Luis Meniccuci, nuestro vicepresidente, nos explica que «normalmente el transporte (de la mercancía) dentro de Estados Unidos tarda unos tres a cuatro días, lo cual asegura que el artículo ya no tendría posibilidad de estar contaminado, pues en ese tiempo el virus ya no sobrevive».

Así lo confirma la Organización Mundial de la Salud, al considerar que «el riesgo de contraer el virus causante del COVID-19 por contacto con un paquete que haya sido manipulado, transportado y expuesto a diferentes condiciones y temperaturas, también es bajo».

Sin embargo, el producto puede volver a exponerse al virus, porque los empaques son manipulados en varios puntos por distintas personas cada vez. Por eso EPS «vela más por el cuidado de su personal, proveyendo guantes y mascarillas permanentemente para protegerlos. En todas nuestras oficinas, sucursales y almacenes EPS, hay dispensadores de gel antibacterial para el cuidado de nuestra gente, además de personal tomando temperatura al ingreso», asegura Menicucci.

¿Entonces ya me puedo quitar la mascarilla?

¡No! No te relajes ni bajes la guardia. Como sabemos, han aparecido variantes más fuertes del COVID-19 en este último año, por eso es muy importante seguir cuidándonos y cuidando al prójimo. En el caso de que recibas paquetes de compras por mensajería, es importante recordar que la permanencia del virus varía según la superficie, temperatura o la humedad del ambiente, por lo cual la Organización Mundial de Salud(OMS) recomienda desinfectar dicha superficie con una solución de alcohol y agua que elimine el virus.

En su portal digital, el Banco BBVA recoge la explicación de la experta en epidemiología y medicina preventiva, María Elisa Purón, quien precisa que lo ideal es que el mensajero deje el artículo en la puerta de la casa. De no ser posible, debes mantener las distancias con él y llevar mascarilla al momento de recibir el producto. Si necesitas firmar la factura o cualquier otro documento, usa tu propio lapicero.

Recuerda que, si quieres que tus compras lleguen hasta la puerta de tu casa u oficina, nuestro courier cuenta con un servicio de delivery sin costo en casi todas las sucursales EPS a nivel nacional. Pero si quieres recibir tu paquete ya, ya, ya y no tienes ganas de esperar a que llegue, puedes pasar a buscarlo evitando filas o esperas a través de nuestro servicio Voy pa’lla, una opción de prepago a través de la aplicación o página web, en la que recibes tu paquete de manera personalizada.

¿Todavía no eres muy experto en esto de los envíos y compras online? No te preocupes, si necesitas ayuda, puedes contactar a uno de nuestros colaboradores a través de nuestro servicio de EPS e-shopping, para que tengas una asesoría de cómo hacer tus compras sin riesgos y aprovechar las mejores ofertas.

El futuro está aquí, y ya no hay excusas para hacer tus compras a tiro de clic de manera segura, por supuesto, por EPS.